El algodón es una de las fibras más absorbente y suaves, además de ser muy durable y de fácil cuidado. Sus fibras son blandas, aislantes y resisten la rotura. Por eso se usa para la fabricación de toallas.
El algodón textil es una planta. Por ser planta tiene raíz, tallo, hojas, flores y frutos.
Su raíz, puede llegar hasta los dos metros de profundidad, por lo que requiere un suelo profundo y con buen drenaje.
Lo que conocemos como algodón, es una fibra que se obtiene de las semillas del fruto. La longitud de la fibra varía entre 20 y 45 cm y con un peso de 4 a 10 gramos. Es de color verde durante su desarrollo y obscuro en el proceso de maduración. Mientras más largas sean las fibras del algodón, mejor es la calidad del mismo.
Para convertir el algodón cosechado en un producto comercializable, las despepitadoras deben secar, limpiar y remover las partículas de vegetales y basuras del algodón con semilla, separar las fibras de la semilla, limpiar las fibras de nuevo, y colocarlas en un empaque, sin deteriorar la calidad de la fibra, para continuar su proceso de hilado y tejido.
Con cien kilogramos de este material se pueden fabricar 90 pantalones, 110 sábanas, 500 camisetas, 900 shorts y 1900 pares de medias.
Además de la fibra que se utiliza en la industria del vestido, también se utiliza para obtener materias primas para jabón, celulosa que se utiliza en algunos cosméticos. Incluso el papel moneda como el euro y el dólar.